Nueva York, una ciudad que cuenta con altos niveles de arte, cultura y entretenimiento, pero, también, elevados índices de violencia y racismo. Desde sus orígenes ha sido una colmena de inmigrantes que, en distintas épocas y por diversas razones, se han desplazado a esta urbe imponente.
A 12 kilómetros de Manhattan se encuentra El Bronx, uno de los cinco distritos de Nueva York, y el más septentrional. Históricamente ha sido conocido como uno de los más peligrosos de la ciudad y del mundo. Lamentablemente, este contexto violento, periférico y abandonado se ha convertido en espacio de culto para la ficción.
El Bronx, una comunidad con múltiple diversidad étnica, golpeada por la pobreza, la segregación y el hacinamiento, se ha forjado desde esfuerzo y el destierro. Hoy esta zona acoge a un millón quinientos mil ciudadanos, de los cuales el 52% son latinos, el 40%, afroamericanos y el 8%, asiáticos y europeos.
Inicialmente El Bronx era una zona industrial de manufactura. A principios del siglo XX, cuando Nueva York entró en una crisis económica, muchas de esas empresas y bodegas quebraron, y comenzaron a crearse proyectos de vivienda con razón social, con el fin de darle hogares, principalmente, a personas que estaban en una situación de pobreza particular.
Después de la primera Guerra Mundial, casi el 45% de sus habitantes eran inmigrantes europeos, la mayoría rechazados por su origen étnico. La zona ya había tomado fama de ser un sector de gánsteres y delincuentes, pero la mayoría de sus ciudadanos eran personas trabajadoras, con un fuerte sentido de familia y comunidad, que habían huido de situaciones políticas, sociales y económicas límites.
Cuando la Gran Manzana se reactivó, muchos judíos, polacos e irlandeses se fueron del Bronx en búsqueda de una vivienda propia. Sus plazas fueron relevadas por miles de afroamericanos, jamaiquinos y puertorriqueños, la mayoría trabajadores industriales.
Entre los años 50 y 70, con la instalación de una carretera, los barrios situados al sur de El Bronx quedaron aislados, lo que contribuyó al deterioro del sector y la convivencia.
Muchos departamentos quedaron vacíos; otros, colapsados. Los inversores, al no recibir renta, decidieron privar de servicios básicos a sus habitantes, y luego, en un acto macabro, incendiar el 80% de los departamentos.
Las décadas siguientes fueron difíciles; desempleo, pobreza, drogas, criminalidad y marginación social, fue una zona olvidada por el Estado y los inversionistas privados, en medio de la crisis económica que afectaba a Estados Unidos.
Desde esas mismas cenizas, las comunidades desdeñadas del Bronx creaban su propia cultura que expresaba la rabia ante la injusticia y discriminación, pero también, el sentido de comunidad, así nace el hip-hop, el break-dance, el grafiti y la música salsa.
A partir de los años 90, muchos edificios fueron reconstruidos, y una nueva oleada de inmigrantes, principalmente latinos, trajo nuevos residentes a las calles abandonadas.
Con inversión pública, varios aspectos fueron cambiando la cara del Bronx, lo que ha aportó muchísimo al bienestar de sus ciudadanos.
El personal policial aumentó un 35% su dotación en los últimos años, llegando a 4.500. Además, la incorporación de un sistema de cámaras de seguridad de reconocimiento facial ha logrado no solo saber quiénes cometen narcotráfico y delitos, sino dónde y cómo actúa la Policía, aspecto relevante frente a los cientos de casos de muertes, abuso y discriminación racial, que están plasmados en decenas de murales.
Este 2021, el Bronx celebra 107 años en medio de una gran transformación que lo ha llevado de ser un símbolo de decadencia urbana en EEUU a un ejemplo de resurgimiento que aún continúa.
Se han creado y restaurado 66 mil viviendas, parques, escuelas, hospitales, centros de salud, infraestructura y universidades. En el sur del Bronx se han duplicado los restaurantes, negocios, residencias privadas, nuevos edificios y centros comerciales.
Además, existen proyectos para la creación de una cancha de tenis, centros deportivos y escuelas de enseñanza bilingüe.
Si bien, aún hay zonas que son más conflictivas, el Bronx es más que eso. Se puede caminar con tranquilidad por sus calles centrales y disfrutar de múltiples atractivos que, sin duda, hay que ver y conocer. Aquí, los cinco que nadie se puede perder:
Yankee Stadium
En la estación 161, St. está el imponente estadio de los yankees o “el gran parque de pelota de El Bronx”. Con capacidad para cincuenta mil personas, es el estadio más caro y más grande que jamás se haya construido en la historia del béisbol, cuyo equipo ha ganado 27 veces la Serie Mundial.
El tour está a cargo de un guía que asegura una visita completa y entretenida. El precio para ingresar es de 25 USD, de abril a enero, todos los días, entre las 11 am y las 13:40 hrs.
Murales
Sin duda, son un símbolo del arte callejero del Bronx. Las imágenes hablan por sí mismas, pintadas por artistas locales, estas relatan la historia del barrio. A la salida del metro, en 1025 Simpson, St. se encuentra un clásico: el mural que lleva el nombre de la zona, “the Bronx”, en cada una de sus letras sus dibujos explican su identidad.
En el 910 Rogers PL, se puede descubrir la imagen del famoso rapero “BIG PUN”. Primer artista latino en ganar un disco de platino.
New York Botanical Garden
Justo en Southern Blvd, se encuentra el jardín botánico del Bronx. Fue uno de los primeros y más importantes de Estados Unidos, construido en 1891.
Este maravilloso espacio cuenta con una extensión de 1 km², y está formado por 48 jardines y docenas de plantas diferentes, invernaderos, un bosque milenario y un río, el Bronx River, que tiene conexión con el zoológico.
Esta enorme extensión natural se puede recorrer y disfrutar caminando o en un tren abierto y gratuito. Dentro del jardín, hay áreas interesantes y hermosas:
El Enid A. Haupt Conservatory, construido en 1890. Este invernadero de hierro forjado posee colecciones de plantas tropicales y exposiciones temporales.
Además, los fines de semana suele haber músicos amenizando el paseo. En primavera, dentro del invernadero se instala el Orchid Show, una muestra de orquídeas y, en verano, rosaleda, azaleas, lilas, loto y magnolias.
El Rock Garden y su cascada forman un oasis alpino en el extremo sur del bosque Thain Family Forest. Si desea disfrutar la floración de cerezos, Cherry Garden es el lugar, estos árboles están repartidos por todo el parque.
Antes de irse, puede pasar por la tienda del Leon Levy Visitor Center, un espacio colmado de semillas, libros de botánica y jardinería, y detalles de decoración del hogar.
Los precios; 23 USD (lunes a viernes) y 26 USD (sábados y domingos). Está ubicado en el nº 2900 de Souther Boulevard.
Zoo Bronx
Construido por inmigrantes italianos, este es uno de los zoológicos urbanos más grandes de Estados Unidos y del mundo. Cuenta con seis mil animales y más de 650 especies, y ha ido eliminando progresivamente sus jaulas, recreando sus hábitats naturales.
Si en su recorrido desea observar cómo se alimenta a animales salvajes como el gorila del Congo, osos polares, monoriel de Asia o cocodrilos, o quiere ver el jardín de mariposas, espectáculos o teatro 4D, debe comprar un ticket Total Experience.
El zoológico está abierto todo el año, y el horario de otoño-invierno es de 10 am a 4:30 pm. Sus precios son los siguientes: menores de 2 años, gratis, de 3 a 12 años, pagan 27 USD. Mayores de 13 años, pagan 37 USD, y mayores de 65, 32 USD.
El zoológico está ubicado en el nº 2300 Southern Boulevard.
Little Italy
Es una pequeña zona italiana que se sostiene gracias al turismo. Es un barrio residencial y tranquilo, con comercio local y ambiente estudiantil. Su población es mayormente latina, italiana y albana.
Para recorrer la zona se recomienda hacerlo desde el cruce de Arthur con la calle 187. Hay decenas de panaderías, pescaderías, carnicerías y pequeños mercados artesanales, atendidos por italoparlantes y extranjeros que mantienen su idioma.
En la avenida Arthur, la calle más comercial del barrio, se encuentran italoamericanos que se encargan de preservar los restaurantes familiares, las tiendas más tradicionales, como también, su mercado más representativo.
Si después de comprar quiere disfrutar de una rica comida en casa, Full Moon Pizza es el lugar. Tiene un menú variado de comida italiana y las mejores pizzas, con opciones veganas y vegetarianas. Los pedidos se hacen en línea, desde las 12 pm a las 21 hrs. Está ubicado en el nº 600, E 187th St.
Otro espectacular lugar, Enzo`s, totalmente recomendable para degustar sabores italianos, en el local. Se encuentra en el nº 2339, avenida Arthur.